No existen muchas especificaciones que podamos hacer con respecto al residual de cloro; como acabamos de mencionar, éste es el cloro que permanece en los estanques luego de que la mayor parte de la dosis aplicada se ha disuelto. La desventaja de éste radica en que reacciona con la materia orgánica del agua creando una serie de compuestos derivados del cloro, los mismos resultan molestos y malolientes, entre ellos encontramos los trihalometanos. El residual de cloro da origen a otros subproductos perjudiciales como son los compuestos orgánicos volátiles, ácidos cloroacéticos, cloritos y cloruro de cianógeno
El residual de cloro actúa por fases, en la primera se combina con la materia orgánica con un nivel residual de cero, luego, el nivel aumenta pero esto sucede cuando se combina en forma de cloraminas (productos causantes del olor desagradable conocido como “olor a piscina”). Muchas personas para eliminar este olor introducen más cloro, lo que ocurre aquí es que el residual de cloro disminuye hasta alcanzar un mínimo denominado “punto de ruptura”. A partir de allí, todo ese cloro agregado se concentra principalmente en aumentar los niveles de cloro residual, el cual se ha convertido en cloro libre y tiene un mayor poder desinfectante.
Aun y cuando se tengan buenas practicas de limpieza, con el tiempo se acumulan las cloroaminas que son el resultado de la reacción química de la urea con el cloro. Cuando esto ocurre y los niveles de cloroaminas en el agua son muy altos, el agua tiene un olor muy penetrante a cloro y el agua es irritante a la piel y a los ojos.
Periódicamente, con mayor o menor frecuencia según se trate de piscinas públicas o privadas, de uso intensivo o de uso moderado, eventualmente se debe dar el tratamiento shock, que tiene como objetivo destruir las cloroaminas y otras substancias que se producen en el agua de la alberca.
En una alberca el nivel de cloro residual es de 1 a 2 ppm. En el tratamiento shock el nivel de cloro se incrementa a 10 o hasta 20 ppm. Esta alta concentración de cloro provoca la destrucción de las cloroaminas y otros compuestos químicos ofensivos y desagradables en el agua. La adición de cloro en forma de hipoclorito de sodio o de calcio, que son los derivados de cloro empleados en el tratamiento shock, es porque se desea que momentáneamente se incremente la concentración de cloro para oxidar químicamente los compuestos indeseables y una vez que se ha logrado el objetivo en cuestión de horas se tienen nuevamente niveles normales de concentración de cloro.
El tratamiento shock se da cuando el agua se encuentra muy sucia por efectos de la lluvia, tolvaneras, por el uso intensivo en un fin de semana o solo con efectos preventivos. Lo que se hace en estos casos es que cuando se va a dar tratamiento shock, se cierra temporalmente la alberca, se agrega el cloro shock en dosis adecuadas para tener un residual de cloro de 10 a 20 ppm y en cuestión de horas los niveles de cloro están en sus valores normales. En la práctica cuando se efectúa este tratamiento, al término del uso de la alberca se agrega algicida y clarificador junto con el cloro shock, por lo que al día siguiente el agua ha formado partículas sedimentadas en el fondo de la alberca que deben ser extraídas con la aspiradora o de otra forma nuevamente pasaran a integrarse al agua de la alberca.
Cuando se extrae el sedimento formado del fondo de la alberca, el agua se desecha al drenaje o se emplea en riego y no es conveniente pasarla por el filtro y regresarla a la alberca, ya que el lodo o sedimento puede no ser retenido por el filtro y regresa a la piscina. Una vez que se ha extraído el sedimento del fondo, el sistema regresa a su secuencia normal, esto es haciendo fluir el agua desde los desnatadores al filtro y regresando el agua a la alberca por medio de los difusores.
Buen Articulo al menos ya tengo la idea de que es el shock
ResponderEliminarYo tampoco tenia idea de lo que era el shock
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